Ahora que muchas de vosotras (y seguro que también de vosotros!) estáis a dieta preparando la operación bikini en pleno apogeo, hay algunas cosas que necesitáis saber puesto que también vienen los fines de semana movidos y con ganas de hacer planes, e incluso los momentos de después del trabajo cuando recibes un ‘Whatsapp’ diciendo si vas a ir a tomar algo… Pues aquí algún truquillo.
Puesto que estás a dieta y los resultados se empiezan a notar, tirarlo todo por la borda sería una de las estupideces más grandes que podrías cometer ya que el trabajo que llevas a las espaldas durante todo este tiempo ser iría al garete. Pero a la vez te apetece como nunca compartir uno de esos atardeceres con los amigos las amigas a hablar de banalidades y poneros al día.
Así que no te pidas por ejemplo refrescos con tantos y tantos azúcares añadidos puesto que sin duda eso engorda y para bien. Tampoco es muy recomendable que tomes bebidas de alta graduación como rones o incluso whisky aunque por propia experiencia te diré que por UNA copa tampoco pasará nada (el problema es que todos sabemos que después de la primera…).
Por contra lo que sí puedes tomar es una cerveza que, aunque contenga gas, trabaja perfectamente contra el colesterol combatiéndolo de una forma muy eficaz, pero como te decía antes… una cerveza, no doscientas. Del mismo modo, una copa de vino también es genial y además no tiene gas, pero por contra tiene (normalmente) más del doble de graduación alcohólica que la cerveza, pero también tomas menos (eso en teoría).
Así que, haciendo un resumen práctico: si estás adelgazando y no quieres perder el trabajo que llevas acumulado pero te apetece ir a tomar algo lo ideal es NO tomar bebidas de alta graduación alcohólica (por una no morirás), y lo que te recomiendo es una cerveza o una copa de vino (tinto).
A disfrutar!!
Cocinitas 